Instalación de revestimientos con clavos de acabado y una clavadora
Los clavos de acabado y la clavadora permiten trabajar con eficacia y precisión cuando se instalan revestimientos de puertas y ventanas. Además, siempre tendrá una mano libre para sujetar el revestimiento. Sin embargo, recuerde que es posible que después tenga que ocultar las puntas de los clavos de acabado con yeso o pintura. Puede leer más aquí sobre los clavos de acabado y las clavadoras más adecuadas para la instalación de revestimientos.
Elección de los clavos de acabado correctos para la instalación del revestimiento
Disponer de un clavo de acabado de la longitud adecuada es fundamental para obtener un buen resultado. La regla es sencilla: el clavo de acabado debe ser tres veces más largo que el grosor del material a fijar. Lea más en nuestra guía:
Elegir la longitud correcta del clavo
Elección de la clavadora adecuada para la instalación de revestimientos
En primer lugar, la clavadora debe ser adecuada para la longitud del clavo de acabado que se utilice. Si se trata de un trabajo de envergadura, es una buena idea utilizar una clavadora neumática, que proporciona más potencia y eficacia. Pero esto significa, por supuesto, que se necesitará un compresor. Para proyectos menores, recomendamos una clavadora eléctrica con cable de alimentación o batería.
Algunos consejos para instalar los revestimientos con clavos de acabado
Asegurarse de que el revestimiento esté a temperatura ambiente
Deje el material en la habitación durante 24 horas antes de fijarlo. Esto facilita el trabajo y reduce el riesgo de fisuras.
Mantener la clavadora recta
Mantenga la clavadora paralela al suelo. La boquilla de la clavadora debe colocarse justo contra el revestimiento cuando se coloquen los clavos.
Tome bien las medidas con anterioridad
Mida cuidadosamente las diferentes secciones del revestimiento y córtelas con una sierra de inglete para obtener intersecciones precisas.
Clave los dos extremos
Si el revestimiento es más ancho de 5 centímetros, deberá clavar ambos extremos. Clave en cada uno de los travesaños: la distancia estándar entre los travesaños es de 60 cm en las paredes interiores.
Remate con un destornillador
Si la punta de un clavo de acabado sobresale después de clavarlo, puede utilizar un destornillador para introducirla en el revestimiento y evitar así las marcas del martillo.
Pegue las juntas
Aplique cola para madera entre las juntas de los distintos elementos del revestimiento para ocultar los huecos. Utilice una cola adecuada para el material.
¡Buena suerte con su proyecto!